Inmensas cantidades de plástico procedente del césped artificial acaban en el mar

Las fibras de césped artificial constituyen el 15 por ciento de las piezas de plástico encontradas en muestras de agua de mar cerca de Barcelona

Por Jason Arunn Murugesu

25 julio 2023

Un campo artificial dañado por las inundaciones en Palma, en la isla de Mallorca, España

Clara Margais/Getty Images

Trozos de césped artificial pueden constituir una gran parte del plástico que se encuentra en el agua del mar cerca de una gran ciudad, según revela un estudio realizado en España.

Liam de Haan de la Universidad de Barcelona y sus colegas analizaron 217 muestras de agua recolectadas frente a la costa de Barcelona, ​​en el noreste de España, y 200 del río Guadalquivir en Sevilla, en el suroeste del país, recolectadas entre 2014 y 2021.

Centraron su análisis en piezas de plástico de más de cinco milímetros, excluyendo las partículas más pequeñas, conocidas como microplásticos, porque es más difícil determinar de dónde provienen, dice de Haan.

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Las fibras que componen el césped artificial suelen ser muy finas, largas y rizadas, y de color verde, afirma, lo que las hace fáciles de identificar.

En Barcelona, ​​las fibras de césped artificial representaron el 15 por ciento de las piezas de plástico de más de 5 milímetros en las muestras tomadas a un kilómetro de la costa. "Nos sorprendió mucho que nadie hubiera informado de esto antes", dice de Haan.

La concentración de fibras de césped artificial flotando en el mar llegó en algunos lugares a 213.200 fibras por kilómetro cuadrado. La gran población de Barcelona (alrededor de 1,7 millones) y el gran número de campos deportivos artificiales en la ciudad probablemente explican por qué la cifra es tan alta, dice de Haan.

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En el río Guadalquivir de Sevilla, la concentración media de contaminación plástica procedente del césped artificial era en promedio 50 veces menor que en el agua del mar frente a Barcelona.

Esta diferencia podría deberse al hecho de que el río simplemente arroja plástico al océano, mientras que el plástico puede acumularse más en el mar, dice de Haan. Sevilla también tiene una población mucho menor que Barcelona, ​​poco más de 700.000 personas.

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De Haan dice que es probable que el problema sea global. "Creo que es bastante inverosímil que esto sólo esté sucediendo en España", afirma. Dado que no sabemos cuánto césped artificial se descompone en microplásticos y nanoplásticos, y en qué medida esto contribuye a la contaminación plástica en los cuerpos de agua, el problema podría ser aún mayor, añade.

Referencia de la revista:

Contaminación Ambiental DOI: 10.1016/j.envpol.2023.122094

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